lunes, 5 de abril de 2010

UNOS HIERROS RETORCIDOS Y UNA GOTA

Allí estaba sentado, viendo batir las olas(*)


Delante de EL PEINE DE LOS VIENTOS” (*), oxidados por el aire, el tiempo y la sal. El día era fresco y húmedo, por un fino chirimiri (*) que caía en el mar volviendo a sus orígenes y desapareciendo en su inmensidad. Fue entonces cuando me di cuenta, de que una gran gota de la lluvia, se negaba a caer en el mar.
En mi soledad pude escuchar el dialogo (*).

La gota de lluvia le decía a la mar: ¿Por que he de perder mi personalidad en ti? Tú eres yo y yo soy tú. Pero me niego a disolverme en ti. Tu partiste de mi y a mi debes regresar. ¿De donde te crees que vienes? Del cielo, por supuesto. Yo soy un individuo independiente, yo volaba con el viento, hasta que me precipite aquí. La mar le respondió: ¿Te acuerdas antes de nacer? ¡No! ¿Tu acaso te acuerdas? Si… Yo soy el infinito. Tú eres fin. En ese instante la gota de lluvia choco contra Un saliente del “PEINE DE LOS VIENTOS” y se precipito en la mar. Me aleje pensando y sintiéndome cada vez mas una insignificante gota de lluvia, precipitándome al inmenso mar Cantábrico (*). Y así para superar mi insignificancia me fui con mi señora y unos amigos a comer a AKELARE (*) que estaba cerca.

NOTAS ACLARATORIAS

Olas*: son como las del mediterráneo, pero a lo bestia, vamos a lo grande.

Peine de los Vientos*: Son unas esculturas de Chillida que parecen Bacalaos tiesos y secos al mar

Chirimiri*: Es una especie de lluvia vasca churruterilla, pero al rato te deja en adobo.

Dialogo*: Traducción del Euskera al Español porque si no lo traduces te quedas in albis

Cantábrico*: Mar donde hay unas merluzas como tiburones

AKELARE* Restaurante Vasco situado en el Igueldo con estrellas de esas del tío de las ruedas, donde un señor con mostacho (Pedro Subijana) te da unos platos, con nombres rimbombantes, impresionantes como la factura, pero merece la pena.

NOTAS GRASTRONOMICAS

Las penitencias gastronomitas fueron agotadoras y de muchas horas de investigación, je, je, je. Las noches terminábamos como las guindas sumergidos en reservas, chateaux y Champagnes y de los restaurantes citare dos de obligada visita. El primero recién abierto en Irun, Ibai Ondo sin estridencias ni florituras, cocina de verdad con pequeños toques de modernidad pero excepcional, con una bodega corta pero de lo más interesante que se puede ver, si se pudiera puntuar sin duda un 10.

En Zumaia, Bedua, un clásico Caserío de cocina tradicional.

Al Dente en Biarritz, lo mas aconsejable calidad / precio.

NOTAS CULTURALES

Visitamos la exposición de Zoe Bray, una antropóloga, derivada a la pintura realista. La mayoría de la obra expuesta son retratos espontáneos bajo su mirada analitica. Su pintura evoca sabores del renacimiento barroco. Un nombre a tener en cuenta

P.D.

Unos días inolvidables con nuestros anfitriones, Elena y Juan Pablo. Que cara de felicidad, cuando dijimos adiós. En sus rostros se reflejaba…

¡Por fin solos…!