martes, 4 de enero de 2011

A LA CARCEL POR FUMAR

Se ha propuesto dejar de picar entre comidas así como evitar las carnes grasas y la bollería industrial hasta que alguien revise su caso. El Colilla ha decidido seguir una dieta hipocalórica y está escribiendo cartas a gente relevante como el Defensor del Pueblo.
Todo para conseguir que alguien revise su caso ya que, asegura: “no me parece justo que me hayan condenado a 30 años de cárcel por fumar un simple cigarrillo en la parada del autobús”.El ha seguido explicando: “en honor a la verdad tengo que decir que mientras me lo fumaba me enfadé con un señor con serios problemas de alopecia que me increpó por el humo. Tuve que improvisar conforme la marcha y saqué unos yogures de coco que acababa de comprar en el Lidel y me cargué al puto calvo lanzándole bífidus a los ojos así como a cuatro más que pasaban por la calle por simple concupiscencia.
No obstante, son detalles sin relevancia que desvían el debate popular y estoy seguro de que la condena tiene que ver con la caza de brujas que hay contra los fumadores”.
Según el juez: “lo del calvo pase, pero las otras cuatro personas tienen derechos y sus muertes no están justificadas aunque hayamos averiguado que, casualmente, uno de ellos tuviera secuestrado un orfanato de niños con problemas de ludopatía y se hayan salvado más de un centenar de vidas”.
Y ha terminado añadiendo: “la supuesta caza de brujas es algo sin fundamento ya que de no haber fumado sólo se habría librado de 14 de los 30 años de condena, ni siquiera la mitad”.