
Hoy es Miercoles de ceniza, y a eso vamos



Hoy es Miercoles de ceniza, y a eso vamos
INGREDIENTES:
125 /
Esta cantidad dependerá del grado de espeso que se quiera
2 Cucharadas de Azúcar
1 Rama de Canela
½ Cascara de piel de Limón (Sin nada Blanco)
PREPARACION:
En un cazo pon a hervir la leche junto con la rama de canela y la cáscara de frutas (intenta que sean trozos grandes para poder separarlos fácilmente cuando esté, y que tengan, de la parte blanca, la menor cantidad posible).
Mientras la leche hierve, lava el arroz, y luego cuando esté hirviendo añádela a la leche y baja el fuego, para dejarla cocer a fuego lento durante unos 20 minutos.
Después de este tiempo, añade el azúcar, y sigue a fuego lento durante otros 15-20 minutos, o mejor hasta que veas que el arroz adquiere una textura cremosa.
Luego colócalo en una fuente y ponlo en la nevera hasta el momento de servir, luego sírvelo en cuencos individuales, espolvoreando por encima la canela, y si quieres, una cucharadita de azúcar
El ser humano se acostumbraba con mayor o menor facilidad (dependiendo de cada uno) a la felicidad. La felicidad es, pues, un estado pasajero al que nos adaptábamos rápidamente. Una vez alcanzada una meta de felicidad esa sensación que nos hace sentirnos “completos” desaparece y surge, como por arte de magia, otra meta para volver a ser felices. La felicidad, dura relativamente poco. La infelicidad suele ser para siempre. ¿Será que la infelicidad o la desgracia nos mantienen vivos? ¿Lo que no te mata te hace más fuerte y lo que te hace feliz más blando? nos acostumbramos a ser felices en poco tiempo hasta el punto de no valorar lo que tenemos. Y cuando lo perdemos, todo se pierde tarde o temprano, nos arrepentimos hasta la eternidad.