miércoles, 3 de febrero de 2010

LA GOTA


Una gran ola, realizo un extraño balanceo, rompió en las rocas y me creo junto a un puñado de gotas, hermanas mías imagino.Miles de gotas flotaban en el espacio antes de caer nuevamente sobre el mar.

Yo seguía allí, recién creada en las alturas movidas por la brisa marina. Vi por primera vez aquella inmensa superficie de agua, los miles de destellos multicolores que producían otras gotas con los rayos del sol, me hizo pensar en lo espectacular del mar. Yo navegaba, en realidad volaba sobre el, esquivando a otras gotas que se formaban a mi alrededor. Giraba una y otra vez en incesantes subidas y bajadas. En una ocasión choque suavemente con una de ellas y de ese choque brotaron gotas más pequeñas, eran como mis gotas gemelas.

En mis últimos instantes, antes de tocar la superficie del océano, me di cuenta de algo que no sabia expresar. Pero ya era demasiado tarde, caí finalmente en el. Tan pronto tome contacto con el agua me di cuenta que en realidad no era una gota, era “OCEANO”. Mis limites no eran diminutos como creía, sino gigantescos. Mi color era inmensamente azul… rojo… y oro al atardecer y por la noche plata.

1 comentario:

Anónimo dijo...

HOLA PIVE DESDE ARGENTINA TE DIJO : ESO SI ES UN BLOG
Te seguire, Arnaldo